FASE DESMOTE Y DESLINTADO

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En operaciones // Inicio de Ciclo 2011-2012

9.6.09

http://www.aporrea.org/desalambrar/a22600.html

Reflexiones sobre la Agricultura Social Siglo XXI: Caso Venezuela

 

Por: Miguel Ángel Núñez

Fecha de publicación: 11/06/06

 

 

En Venezuela en diferentes textos se ha demostrado como los procesos científicos y productivos del monocultivo se han subordinados a las directrices científicas y tecnológicas de las empresas transnacionales. Distintas líneas de investigación del agro y ganadería; la transferencia de tecnologías; los programas de extensión agrícola; las políticas agrícolas gubernamentales, como también las universidades, escuelas técnicas agropecuarias e instituciones oficiales dedicadas a las ciencias del agro se han sometido en procura de imponer un desarrollo agrícola no apto a nuestras particularidades del trópico.

 

Cuál es el prospero resultado de nuestra agricultura nacional? Los pequeños y medianos productores en que y como se han beneficiado? A que se debe que en 6 años de gobierno revolucionario no haya habido forma ni manera de un crecimiento sostenido de la actividad agrícola? Además de cambios de viejas por nuevas instituciones, de la improvisación institucional, de las incoherencias y contradicciones encontradas en el devenir productivo; en los bajos rendimientos y la baja capacidad técnica por reducir los costos y las carencias encontradas en las políticas de precios; casos más recientes el café, maíz, algodón por citar algunos desfases, nos preguntamos; ¿porque nos empeñamos en continuar con estas propuestas tecnológicas agropecuarias si no dan pies con bolas? Que podríamos perder en avanzar hacia otras nuevas tecnologías? ¿ Si la revolución bolivariana exigen cambios en la estructura productiva del agro porqué no se asumen como políticas de estado? Estas como otras reflexiones que a continuación presentamos nos invitan a elevar un debate sostenido, coherente y creativo con la dirigencia agroalimentaria revolucionaria para avanzar participativamente en la definición de políticas públicas que el área de transformación requiere y el proceso revolucionario también.

 

Reflexiones en el debate:

 

1ra. Reflexión .

 

La ausencia de un liderazgo político y colectivo agrícola, evidencia una inexistencia de lazos y vínculos entre dicha dirigencia y la débil dirección científica, tecnológica y educativa, lo que permite la permanencia de distintos cuellos de botellas en la dinámica productiva nacional.

 

2da.Reflexión .

 

En contraposición a las condiciones naturales del trópico se continúa con la imposición de una tecnología agropecuaria basada en el monocultivo transgénico causando agravios ambientales y de salud pública. Nuestra dieta por la alta dependencia de alimentos importados se está constituyendo transgénica.

 

3ra.Reflexión .

 

Además del histórico problema del latifundio que se vive en Venezuela, la propiedad, el manejo y control eficiente, eficaz y efectivo de los medios de producción es ahora un factor determinante en el desarrollo del proceso productivo.

 

4ta.Reflexión .

 

Los cambios hacia el desarrollo de una agricultura sustentable no necesariamente va a depender de la voluntad política de los actores políticos, el campesino y productor necesariamente tienen que cambiar la visión economicista del proceso de producción actual, haciendo énfasis en el carácter social del proceso y del necesario incremento de la productividad.

 

5ta.Reflexión .

 

La nueva visión del campesino y productor debe orientarse en la organización social de la producción teniendo su base en la economía social y solidaria.

 

6ta. Reflexión .

 

La agricultura sustentable debe consolidar su economía en los principios de la economía social y solidaria.

 

7ma. Reflexión .

 

Para la conformación y fortalecimiento de las razones ideológicas y políticas del campesino y productor se debe valorar los distintos contrastes entre la agricultura convencional (dependiente del uso de agroquímicos) frente la agricultura sustentable.

 

8va.Reflexión .

 

Para avanzar en la recuperación de suelos, cosecha de agua y rescate de las semillas agroecológicas debe seguirse impulsando el desarrollo endógeno con la visión estrictamente ambiental y agroecológica.(ver anexos de tablas)

 

9na. Reflexión .

 

Para darle cabida a los diferentes impactos productivos, sociales y comunitarios se debe avanzar en la consolidación de las distintas iniciativas de la producción agrícola sustentable y agroecológica.

 

10ma. Reflexión .

 

Consolidar distintos procesos de producción agroecológica implica la creación de hechos constituyentes para progresivamente ir desplazando el poder agrícola constituido.

 

Reflexiones para avanzar:

 

Una de las expresiones más sentidas en la III Cumbre Mundial de Desarrollo Sustentable celebrada en Johannesburgo Sur África en Septiembre de 2002, cuando, quizás por primera vez en las historias de tantas reuniones y convenciones mundiales de este tipo, fue; que se reconoció la existencia de dos grandes agriculturas, que se sienten, existen y están enfrentadas en nuestro planeta: la agro empresarial-corporativa- transgénica y la tradicional de los pequeños y medianos productores campesinos.

 

En esa Cumbre al fin se reconoció lo mucho que el sector de los pequeños y medianos productores puede aportar cuando se trata de conformar la planificación y programación de propuestas de investigación, ciencia y desarrollo agrícola. Fundamentalmente encaminados a trabajar por una agricultura sustentable. A estos últimos, les valió en dicha Cumbre proponer e impulsar el Plan de Johannesburgo desde los distintos retos que desde la agricultura sustentable nos proponemos. Retos donde la agricultura se relaciona y hace sinergia con áreas como la salud, energía, clima, agua y biodiversidad. Este plan pudiese concebirse como una excelente propuesta para un gobierno local, municipal, regional de interés evaluar.

 

En Johannesburgo también se reconoció que a pesar de las precarias y difíciles condiciones sociales y productivas los pequeños y medianos productores han logrado innovar y adaptar tecnologías sencillas, abiertas, blandas, ecológicamente, apropiadas a sus micro-regiones superando las limitaciones físico naturales propias de su región. Aunque ustedes no lo crean se ha dado un uso sustentable en los sistemas de producción, producto del orden establecido entre los componentes del sistema productivo, sus funciones y manejo.

 

Corroborando lo anteriormente expuesto una publicación de la FAO (2002) en conjunto con varias organizaciones campesinas y algunas universidades sistematiza la mayor encuesta conocida sobre la agricultura sustentable considerando 45 proyectos en Latino América, 63 en Asia, 100 en África. En estos 208 proyectos/iniciativas, cerca de 8,98 millones de agricultores han adoptado las prácticas agroecológicas y los principios de la agricultura sustentable cubriendo 28,92 millones de hectáreas. Considerando que hay 960 millones de hectáreas bajo cultivo- cultivo arables y permanentes- en África, Asia y Latino América, la agricultura sustentable está presente en, por lo menos, 3% de esas tierras ( las tierras arables comprendían 1600 millones de hectáreas en 1995/1997, de las cuales 388 millones de hectáreas se encontraban en los países industrializados, 267 millones en los países en transición y 960 millones en los países en desarrollo: FAO, 2000).

 

El histórico reconocimiento acaecido en Johannesburgo ha generado más debates, nuevos congresos, talleres, espacios de discusión y sustanciosos avances, por revertir el flagelo del hambre estructural. Se ha tomado otra perspectiva socio-política-productiva especialmente para avanzar en la agricultura social del siglo XXI. Ello pasa por distinguir, caracterizar en profundidad las dimensiones de las dos agriculturas que se encuentran enfrentadas por el benéfico de la humanidad. La agricultura convencional dependiente de los agroquímicos y la agricultura sustentable. De estos significantes contrastes debemos valorar nuestra ubicación y de allí avanzar de acuerdo a nuestros visones, valores y compromisos con nuestras relaciones sociales y de progreso sostenido en el conocimiento productivo.

 

Reflexiones para finalizar:

 

El nuevo proceso revolucionario bolivariano exige no repetir los errores del pasado en materia de alimentación. No se trata de ingerir alimentos por ingerirlos, solo para saciar el hambre, o imitar modas de otras sociedades. Implica ingerir alimentos y comidas con un alto aprovechamiento biológico. Contrario a la agricultura convencional, la cual se ha convertido en una generadora de problemas de salud pública. Se siguen dándose casos irreversibles de remediar, donde los padecimientos, las anomalías y deformaciones orgánicas por las ingestas de alimentos no podrán ser superados

 

La dirigencia agroalimentaria revolucionaria nacional deben ampliar las bases del proceso revolucionario en nuestro movimiento campesino. Es necesario concertar sostenidos espacios de interacción, relación, coordinación y sinergias entre todos los sectores sociales y productivos involucrados en el área agroalimentaria para superar las deficiencias ideológicas y políticas que se han cometido en la historia de los desarrollos agrícolas del pasado en nuestro país.

 

Entre dichas debilidades que siguen cobrando fuerzas en nuestro proceso revolucionario podemos presentar algunas: 1) la ciencia del agro nacional no ha tenido en su discusión ni principios, ni leyes rectoras para la evolución del pensamiento científico agrícola, no habido creación en la aplicabilidad de nuevos conocimientos 2) las salidas a las soluciones de los problemas técnicos en los pequeños y medianos productores las hemos buscado en las soluciones aplicadas a los grandes productores. 3) la tendencia anterior nos ha obligado a no diferenciar entre las naturalezas socio-productivas entre los sectores productivos. 4) se ha llevado una extensión y transferencia de tecnología desfasada del espacio y tiempo en su aplicación, conllevando a su inercia, descrédito y desaparición. 5) el técnico no puede innovar en el campo, trata de hacerlo inescrupulosamente el distribuidor de los agroquímicos, desnaturalizando mas las funciones de la extensión y transferencia. 6) el pretender dar un consejo o asesoría técnica desfasada en principios e improvisada en el devenir, conlleva a debilitar mas al pequeño y mediano productor, por cuanto el ha sabido reconocer que su realidad y racionalidad productiva se desfigura, creando desconfianza e inseguridad en la aplicación de dichas técnicas. Pero, que al final sede ante la presión de no perder la cosecha y no andar en la modernidad por no usar las tecnologías agropecuarias contaminantes de siempre. Al parecer hemos encontrado otras razones del desplazamiento de nuestros productores a las ciudades o urbes.

 

Los motivos anteriormente expuestos nos elevan nuevas reflexiones: ¿como puede haber políticas agrícolas para los pequeños y medianos productores si la de los grandes productores han adolecido de principios científicos y técnicos en su cabal desarrollo y para la evolución del conocimiento mismo del agro ?

 

Reiteramos, también, son dos realidades de naturaleza productiva diferente que necesariamente exigen tratos y desarrollo distintos y alternativos.

 

Necesitamos una nueva ciencia y tecnología para el gran productor agrícola, Ciencia, que ha de nacer en la evolución del conocimiento científico y tecnológico del pequeño y mediano productor, el cual, nos conecta con nuestra realidad cultural, social, agroecológica y de las bases genéticas de nuestras semillas y germoplasmas ancestrales. Auténticos patrimonios y pivotes de arranque de nuestra soberanía agroalimentaria.

 

 

ipiat2000@yahoo.e